Descubre si tienes salud financiera o necesitas ponerle remedio

La salud financiera es muy importante, por eso te conviene conocer cómo mantenerla y procurar que siempre sea la mejor. ¡Sigue leyendo!

 

¿Cómo mejorar o cuidar tu salud financiera? Mantenerse en buena forma no es solo una cuestión física, mantenerse en forma también tiene que ver con tu cartera.

¿Lo sabías? Si piensas que es muy difícil lograrlo, no te preocupes, aquí te vamos a decir cómo mejorar esa parte de tu salud y lo mejor de todo, es que no vas a necesitar de gimnasios o de clases para hacerlo, todo lo puedes hacer a partir de este momento. ¿Comenzamos?

Primero, conoce las enfermedades financieras

¿Cuáles son las enfermedades financieras? Existen y son más comunes de lo que crees, es probable que todos suframos de alguna sin saberlo. ¿Quieres descubrirlo?

• Adicción al gasto: pasa cuando te gusta mucho comprar, no te gusta tener el dinero, más bien todo lo que puedes hacer con él por lo que te cuesta trabajo ahorrar. 
• Fiebre de dinero: al contrario de los primeros, los que tienen fiebre de dinero, ven éste como el fin de todo. Son avaros y no les gusta gastar en nada, aunque sea muy necesario hacerlo.
• Falta de estrategia: esto es la falta de planes con tu dinero a largo plazo, puede que estés ahorrando, pero no lo están haciendo consciente y por lo tanto no vas crecer, te quedarás igual.
• Síndrome de vacas gordas: se le llama así al periodo de abundancia, no hay gastos fuertes, tus deudas están pagadas y puedes darte gustos, pero al vivir tan cómodamente, no te das el tiempo revisar el estado de tus finanzas y llegan las malas noticias.
• Síndrome de la devaluación: ¿estás ahorrando, pero no lo estás haciendo en un banco? Corres mucho peligro de sufrir la devaluación. Al ahorrar por tu cuenta no estás protegiendo tu dinero, por lo que si tienes un billete de 20 pesos, pero después ocurre algo que baja su valor, ese dinero lo has perdido.
• Automedicación: muchas personas piensan que no necesitan el consejo de expertos en finanzas y toman decisiones como prestar dinero o pedir préstamos sin saber lo que están haciendo. Esto ocasiona más problemas que soluciones.

¿Descubriste que tú tienes alguna? Si es así, no te preocupes, vamos a encontrar la solución.

Recupera tu salud financiera de forma sencilla

La salud es lo más importante, de hecho, la salud financiera es importante porque a partir de ella podemos medir nuestra capacidad de satisfacer nuestras necesidades y de prepararnos para futuras sorpresas. La salud financiera es importante porque nos permite ser lo suficientemente fuertes para actuar.

No existe una sola forma de saber si eres financieramente saludable, pero sí puedes comenzar por pequeñas acciones que te llevarán a una salud excelente.

• Revisa tus números una vez al mes, mira tus gastos, tus ahorros y ve qué tanto te “desfalcas” o no mediste para prevenirlo el siguiente mes. Aprende a administrar tu dinero como un profesional.
• Tener dinero es bueno, pero porque te ayuda a cumplir metas y objetivos. El dinero por sí mismo no es el objetivo, es el medio. ¡Recuérdalo!
• No dejes tu futuro financiero al azar, piensa a futuro, plantea objetivos para cumplir y haz un plan para lograrlo. Si quieres irte de vacaciones, revisa los costos y que conseguirlo sea tu meta financiera.
• Los tiempos de abundancia son buenos, pero la vida puede dar muchas vueltas y dejarnos abajo. Un buen momento siempre es ideal para hacer una pausa y revisar el estado financiero que tienes con tu banco. También es bueno que conozcas qué es la inflación y cómo puede afectarte.
• No dejes que tu dinero se pierda, investiga opciones de ahorro e inversión y mete ahí tu dinero. Es la forma de mantener seguro tu dinero por un largo tiempo.
• Pide consejo a quienes sepan de finanzas o puedes seguir consultando este blog que te da consejos útiles para mejorar tu economía.

¿Cómo tener salud financiera? La respuesta es que necesitas primero conocer qué es lo que estás sufriendo, identificar tu enfermedad financiera y luego comenzar a actuar con pequeños cambios que pueden hacer la diferencia.