25 de noviembre de 2024
Haz un plan de financiamiento para crecer tu negocio
Como emprendedora, el financiamiento es clave para poner e impulsar tu negocio; por ello, es importante que sepas bien qué es el financiamiento, los diferentes tipos que hay y cuál es el mejor para tu emprendimiento. ¡Vamos!
¿Qué es un plan de financiamiento?
El financiamiento es el proceso o trámite a través del cual una emprendedora o emprendedor puede obtener el dinero o recursos necesarios para iniciar, mantener o expandir su negocio.
Sin embargo, no basta sólo tener el capital y listo: contar con un plan de financiamiento es clave para saber qué tipo de financiamiento elegir y cómo aprovecharlo al máximo para reducir riesgos y tener mejores oportunidades de crecimiento.
Las ventajas de crear un plan de financiamiento son:
- Te ayuda a definir objetivos claros y alcanzables, facilitando el crecimiento de tu negocio.
- Podrás administrar mejor tus gastos e ingresos, teniendo a su vez un buen manejo del presupuesto.
- Te sirve para no perder el control ante una crisis, ya que tienes visibilidad de tus finanzas y es más sencillo ajustar un plan que hacer uno de cero.
Antes de poner manos a la obra con tu plan, primero debes considerar las fuentes de financiamiento que existen, así como analizar sus pros y contras para verificar que te convengan.
Fuentes de financiamiento para pequeños negocios
Existen varios tipos de financiamiento para emprendedores, siendo estos los más comunes:
Préstamos bancarios
Los préstamos o créditos bancarios son uno de los financiamientos más habituales y confiables para tu negocio, ya que además de ser emitidos por entidades financieras reguladas, hay una buena variedad de préstamos entre los que puedes elegir y tienen condiciones claras.
Sólo toma en cuenta que algunos de los requisitos para este financiamiento son tener un buen historial crediticio, contar con un aval y tener un buen control de tus finanzas para no atrasarte con los pagos.
En Compartamos Banco, contamos con dos tipos de créditos:
- Crédito Grupal. Pensado para emprendedores primerizos o que nunca antes hayan solicitado un préstamo bancario para que se sientan acompañados al contar con el apoyo de su grupo, el cual debe ser de mínimo 5 integrantes.
- Crédito Individual. Dirigido a quienes sean dueños de un negocio de al menos 6 meses de antigüedad y busquen expandirlo. No importa si tu negocio lo manejas desde tu casa o eres vendedora ambulante, ¡puedes solicitar este crédito!
En ninguno de los créditos cobramos comisiones por apertura y administración, y contarás con una tasa fija individualizada durante toda la vigencia de tu crédito.
Línea de crédito
La línea funciona como una tarjeta de crédito, pero para uso de negocios en vez de uso personal. Tal como una tarjeta, tendrás un monto límite de crédito y sólo pagarás intereses del dinero que utilices.
Este tipo de financiamiento es más adecuado para gastos como compra de inventario, emergencias o algún desbalance en el flujo de efectivo. Úsala con responsabilidad, cumple a tiempo con tus pagos e intenta dar montos para no generar intereses.
Préstamos entre particulares
Otro financiamiento que puedes incluir en tu plan es el préstamo entre particulares, es decir, pedirle dinero a amigos o familiares para que te ayuden a sacar adelante tu negocio. Aunque esta fuente de financiamiento puede ser considerada informal, una manera de cuidar los intereses de todas las partes y evitar conflictos que afecten su relación es creando un contrato que estipule:
- La cantidad que te prestarán, y si te darán el dinero en una sola exhibición o por pagos.
- Plazo en que deberás liquidar la deuda y los montos totales que irás cubriendo.
- Si hay intereses y cuál es el porcentaje que te cobrarán.
- Si dejarás una propiedad en garantía o si una persona te representará como aval, en caso de que ya no puedas cubrir la deuda.
Programas del gobierno
Otro financiamiento son los subsidios o programas que el gobierno ofrece para apoyar a emprendedores, como PRONAFIM o FONDESO. Este último tiene financiamientos dirigidos a mujeres emprendedoras, así como a distintos tipos de negocios: tianguis y mercados sobre ruedas, mipymes, empresas culturales, entre otras.
Ahora que ya conoces los financiamientos más comunes para negocios, puedes seleccionar el que más te convenga y empezar a armar tu plan de financiación.
Lo que debes considerar al hacer un plan de financiamiento
Hacer un plan de financiamiento no es complicado
1. Define tus objetivos y necesidades
Si apenas iniciarás tu negocio, anota los recursos que necesitas para ponerlo en marcha; si ya tienes un emprendimiento, entonces haz una lista de los gastos actuales y los gastos que debes hacer para hacerlo crecer.
En esta lista, incluye pagos de renta de local, pagos de servicios, proveedores, materia prima, herramientas, sueldos, etc.
Una vez que tengas identificados estos gastos, plantea los objetivos de tu negocio. Estos tienen que ser específicos, realistas y medibles para que puedas registrar su avance.
2. Compara tus opciones de financiamiento
De los tipos de financiamiento que te compartimos, elige 2 o 3 y compáralos entre ellos para tomar la mejor decisión. Te recomendamos hablar con un asesor o representante del banco o entidad financiera que hayas elegido para resolver tus dudas y poder comparar los beneficios de cada producto.
Recuerda comparar el costo total de la deuda que adquirirás y hacer un cronograma de pagos para que puedas planificar desde ya tus nuevos gastos y organizar tus finanzas.
3. Establece cómo se usará el dinero
Una vez que hayas elegido el financiamiento que más se adapte a tus posibilidades y sepas el monto total que te prestarán o que recibirás en tu línea de crédito, puedes definir qué porcentaje destinarás a cada necesidad de tu negocio.
Estos gastos deben estar equilibrados para que mantengas un buen flujo de caja y tu negocio no se vea afectado porque alguna área está recibiendo menos dinero del que requiere.
4. Toma en cuenta las emergencias
Dentro de las necesidades de tu negocio, no olvides contemplar un fondo de emergencia. La mejor forma de hacerlo es que apartes un monto del dinero que recibirás para ahorrarlo, o mejor aún, invertirlo en una cuenta adicional para que genere rendimientos y tengas un fondo aún mayor.
Tener el plan de financiamiento adecuado puede ser la clave para el éxito de tu negocio, así que elige la opción que más te convenga y sigue estos consejos para planificar las finanzas de tu emprendimiento.